Vandalizan memorial del Holocausto en Polonia con grafitis antisemitas y alusiones a Hamás
Itongadol.- Un sitio conmemorativo del Holocausto fue profanado este fin de semana en la localidad de Dukla, al sureste de Polonia, con pintadas que incluían esvásticas y consignas pro-palestinas. El ataque se produjo en las ruinas de una antigua sinagoga y cementerio judío, donde se ubica una placa memorial erigida en honor a las víctimas de la Shoá.
Los agresores pintaron la palabra “Palestina” junto a una esvástica sobre la placa conmemorativa, en un acto que fue calificado como un “hooliganismo lleno de odio” por la Asociación Shtetl de Dukla, una organización dedicada a preservar el legado judío de la región.
“Como asociación que trabaja por la memoria de los judíos de Dukla, y como ciudadanos, sentimos vergüenza por este acto. Es un atentado contra la historia y la convivencia que alguna vez existió entre polacos y judíos en nuestra ciudad”, expresó Jacek Koszczan, miembro de la asociación, en un comunicado.
La organización presentó una denuncia ante la policía local y pidió que se tomen medidas ejemplares contra los responsables. Al mismo tiempo, extendió una inusual invitación a los autores del ataque: participar en talleres educativos sobre historia judía y el Holocausto. “El conocimiento reduce el miedo y puede abrir la puerta al diálogo y al cambio de actitud”, afirmaron.
El ataque ocurre en un contexto de creciente antisemitismo en Europa y en Polonia en particular. Días antes, el eurodiputado ultraderechista Grzegorz Braun desató indignación al calificar de “falsas” las cámaras de gas de Auschwitz y acusar al museo del sitio de difundir “pseudohistoria”. También repitió el clásico libelo antisemita de que los judíos cometían asesinatos rituales.
El Museo Estatal de Auschwitz anunció que emprenderá acciones legales contra Braun. En Polonia, la negación del Holocausto constituye un delito penal que puede ser castigado con hasta tres años de prisión.
“La situación es alarmante. Polonia se encuentra en una encrucijada y debe enfrentar este odio de inmediato”, declaró Meir Bulka, presidente de la organización J-nerations. “El jueves pasado vimos cómo un parlamentario polaco negaba abiertamente el Holocausto mientras era aplaudido por una multitud. Hoy vemos grafitis nazis en un cementerio judío. No podemos ignorar las señales”, agregó.
El memorial vandalizado en Dukla fue construido por iniciativa de los propios habitantes de la ciudad, como símbolo de respeto hacia la comunidad judía que una vez formó parte integral de la vida local antes de ser exterminada durante la Segunda Guerra Mundial. La profanación del sitio reabre heridas profundas y subraya la urgencia de reforzar la educación sobre el Holocausto y el combate al antisemitismo en Europa del Este.

